Septiembre 14, 2025
Creados por Dios para la gloria
PONGA ESTO EN ORACIÓN:
«Ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo. Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano» (1 Corintios 15:56-58).
PIENSE EN ESTO:
¿Cuál es la diferencia entre un diamante y un pedazo de carbón? Ambos están hechos de carbono. El carbón es carbono en humillación; el diamante es carbono en gloria. Son la misma sustancia, solo que una está perfeccionada y transformada. De igual manera, un día pasaremos de la corrupción a la incorrupción. Pasaremos del deshonor a la gloria.
Ninguno de nosotros ha visto jamás a un ser humano tal como Dios lo diseñó originalmente. No alcanzamos a imaginar lo que Dios creó cuando nos formó. Siglos de pecado han manchado, deformado y debilitado a la humanidad.
Suponga que nunca ha visto un tren. Se produce un descarrilamiento cerca, y yo lo llevo al sitio del accidente y le digo: «Mire, eso es un tren». ¿Realmente habría visto usted un tren? Podría decirse que sí, pero lo que ha visto en realidad es un accidente de tren. Así es con nosotros. Pero un día, todas las limitaciones de este mundo desaparecerán: no habrá más debilidad, ni más suspiros, ni más llanto, ni más muerte, ni más luchas. Tendremos la perfección que Dios quiso para nosotros desde el principio.
¿Cómo debería cambiar su perspectiva de la vida el saber que tiene victoria en Jesús?
¿Cómo le anima recordar la esperanza de la gloria?
PUNTO DE ACCIÓN:
Ore y pídale a Dios que le ayude a vivir enfocado en su esperanza eterna y no en los placeres temporales del presente.
© Profundice al ver: SU CUERPO RESUCITADO - 1 Co.15:35-58 (Q1707) https://youtu.be/xaBRYb2Fe0U
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