La oración es muy importante en la vida del creyente. Lo que nos mantiene con vida espiritual, con victoria en nuestra vida, es que podamos estar en comunión con nuestro Dios; que es nuestro Padre celestial. Esta relación se logra a través de la oración: el medio de comunicación que tenemos con el trono de Dios. Cristo pasaba noches y días enteros orando, o de madrugada: postrado.
November 8, 2016
La felicidad no está en la riqueza material, el poder político, militar o económico; sino en el tener a Cristo en el alma. Lo más grande que hay, es salvar el alma: reconocer a Jesucristo como el Hijo de Dios. La obras agradan a Dios, pero ellas no salvan. Son pocos los que se salvan; que entran por el camino estrecho: el que lleva a la vida eterna, obedeciendo la Palabra de Dios.
November 7, 2016
La Iglesia está esperando a Cristo. Los que mueren creyendo en Cristo y haciendo su Voluntad, su espíritu y su alma van al Paraíso; hasta que suene la trompeta: sus cuerpos van a ser resucitados. Los que estemos vivos y en Santidad, seremos revestidos; cuando suene la trompeta. En un instante, los verdaderos cristianos serán transformados y desaparecerán de la Tierra, con Cristo.
November 6, 2016
Si el Señor nos levanta con los muertos en Cristo, es que estamos aprobados, santificados, redimidos y comprados por la sangre de Cristo; y pertenecemos a la gran Iglesia o Asamblea de los redimidos de su pueblo. Habrá un gran banquete, para los creyentes. Todos los que se han separado del pecado, tienen un lugar especial en el Cielo: la Nueva Jerusalén, la Santa Ciudad de Dios.
November 5, 2016
Hay un trono blanco donde va a haber un juicio; y van a comparecer todos los hombres y mujeres, que murieron. No hay Purgatorio, ni Limbo. Sólo hay dos lugares de espera: el Hades o Infierno para los pecadores, y el Paraíso para los creyentes. Cuando Cristo venga, los muertos en Cristo resucitan primero, y los que están vivos son transformados y van al Cielo: a un lugar exclusivo.
November 4, 2016
Mientras estamos en este cuerpo, estamos ausentes del Señor. Pero Dios nos ha prometido una gran morada en el Cielo; la cual sabemos que existe, por fe. Morir en Cristo, ya es ganar la felicidad eterna. Quisiéramos estar ausentes en este cuerpo, y presentes en el Señor. Para entrar al Cielo, hay que vivir conforme a la Palabra de Dios. Son muy pocos, los que van a llegar al Cielo.
November 3, 2016
Cuando andamos en este cuerpo, andamos por fe. Hay una gran diferencia entre ser cristiano y ser religioso. Alguien puede ser religioso de cualquier Iglesia, pero si no obedece la Palabra de Dios; está sumamente perdido. Si estamos en este cuerpo, tenemos que hacer sólo lo que agrada a Dios; que es vivir de acuerdo a su Palabra, en obediencia. La desobediencia es un gran pecado.
November 2, 2016
San Pablo refiere su arrebatamiento al tercer Cielo, al Paraíso, donde oyó palabras inefables; que no le es dado al hombre, expresar. Jesucristo le dio toda la enseñanza del Evangelio, en ese arrebatamiento. Todos los que mueren sirviendo con sinceridad a Cristo, van a resucitar un día. Pero el cuerpo, es depositado en el sepulcro, que es una bóveda o nicho; que no es el Infierno.
November 1, 2016
San Pablo escribe a la Iglesia de Corinto y le envía una Carta al Pastor; que es el ángel guardián de la Iglesia: el ungido de Jehová. Refiere que nuestra morada terrestre, tabernáculo o cuerpo, se puede deshacer; pero tenemos de Dios, un edificio o casa preparada hecha por Él, eterna: en los cielos. Por eso, cada día, debemos morir al pecado: estar siempre, separados del pecado.
October 31, 2016
No podemos abandonar la Obra de Dios: predicar su Palabra. Hay que seguir sembrando y manteniendo la integridad, donde quiera que nos encontremos. El hombre exterior se va desgastando, pero el interior se renueva cada día. Cualquier tribulación es momentánea. Sabemos, que se acerca la manifestación de la gloria de Dios. Los que estamos en este camino: gozamos de paz, de felicidad.
October 30, 2016